Última Edición

¡Bienvenidos a El Apuntador, la página de las artes escénicas!

Apuntador 71 Foto.jpg
Necesito Recordar l Gustavo Moya

Necesito recordar. Foto cortesía

Necesito Recordar l Gustavo Moya

Plaza del MAAC. Un automóvil estacionado en medio del espacio. Dos pantallas, focos, cámaras, cables a la vista. Antes de que empiece la función, Cristina Baquerizo y Juliana Zúñiga ya están ahí: limpian el auto, caminan alrededor, prueban luces. El público llega, se acomoda y llena una hoja con datos básicos: nombre, género, provincia, discapacidad. Aunque todavía no ha comenzado, la obra ya está ocurriendo.

Necesito Recordar. Foto Gustavo Moya

Necesito recordar, dirigida por Jorge Alcolea, dura alrededor de cuarenta minutos y se construye como una sucesión de escenas breves. Es danza, pero también hay acciones teatrales y procedimientos tomados del cine. En las pantallas aparecen fragmentos de películas de Hitchcock, Lynch, y otros del canon establecido, que funcionan más como atmósfera que como cita literal. A momentos, las luces reales del espacio se sincronizan con las de la imagen proyectada: cuando alguien enciende una lámpara en la película, una intérprete enciende un foco en escena.

El título de la obra proviene de una frase de Belleza Americana: la sensibilidad de grabar algo para poder recordarlo. En escena, esa idea se traduce en gestos y objetos mínimos. Una bolsa de plástico gira en el aire impulsada por un ventilador de mano. Se simula lluvia arrojando agua sobre el auto; más adelante, una espuma blanca hace de nieve. En vez de ocultarse, el artificio se muestra. El espacio funciona como un set de filmación armado a la vista del público.

Necesito Recordar. Foto Pedro Cagigal

En ese cruce se difumina el cine y la  escena, los gestos pequeños adquieren relevancia. Encender un cigarrillo, llevarlo a la boca y guardar los fósforos son acciones que se repiten siempre de la misma manera y que forman parte de una coreografía de la cotidianidad. Son detalles que quizás se diluyen en un teatro con el público a distancia, pero que la cámara registra con claridad. La danza está allí, en lo mínimo, en lo aparentemente común.

La escena que concentra mayor tensión ocurre en la calle, de noche. El personaje de Juliana Zúñiga fuma un cigarrillo. Lleva tacones altos y un vestido elegante, cubierto por una gabardina amarilla. Viene a la memoria Gloria, de Cassavetes, pero también un imaginario urbano reconocible: una mujer sola en la esquina, en riesgo. Ella es abordada, se defiende, saca un revólver. El tono es realista, casi teatral, como una coreografía de la violencia. El público permanece en silencio.

Necesito Recordar. Foto Pedro Cagigal

Más adelante, la situación se repite, esta vez sin defensa posible. El revólver no está. El ataque ocurre de nuevo y el cuerpo termina en el suelo, golpeado y expuesto. Es un momento duro e incómodo, que desplaza cualquier lectura liviana de la obra y funciona como comentario social directo sobre la vulnerabilidad del cuerpo femenino en el espacio público.

El automóvil articula la obra como una road movie. En una escena, Cristina Baquerizo conduce mientras en pantalla aparece una secuencia que remite a Psicosis. En otra, ambas intérpretes hacen un viaje con el paisaje proyectado detrás, como en un rodaje. El coche nunca se mueve, pero el desplazamiento está sugerido. Las intérpretes se turnan el centro de la acción: mientras una baila, la otra apoya, sostiene luces, graba u observa. Incluso cuando el dispositivo cinematográfico domina la escena, la danza nunca desaparece: permanece debajo, precisa y ejecutada con oficio.

Necesito Recordar. Foto Gustavo Moya

El uso de pantallas, cámaras y transmisión en vivo no es nuevo en el trabajo de El Pez Dorado. Esta agrupación, con más de una década de trayectoria, ha desarrollado un lenguaje propio donde la danza dialoga con el cine, el teatro y la tecnología, incluso en formatos como la videodanza producida durante la pandemia. Necesito recordar continúa esa exploración. Como ha señalado  Alcolea, “es una pieza en proceso… la idea es irla cargando de más referencias de cine y de todo lo que nos ha conmovido o ha cambiado nuestra manera de ver”.

La obra termina dejando visibles sus mecanismos. Queda una certeza: aunque por momentos parezca de otra manera, lo que sostiene todo es el cuerpo en movimiento.

Ficha técnica

Obra: Necesito recordar
Coreografía y dirección: Jorge Alcolea @miradecerca
Intérpretes/ co-creadoras: Cristina Baquerizo @crisbaquerizo, Juliana Zuñiga @julianazk7

Lugar: MAAC (Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo) @maacec, GUAYAQUIL

Diciembre 2025

 Gustavo Moya (Portoviejo, 1980) Periodista y fotógrafo.

Más en: https://www.elapuntador.net/portal-escenico/gustavo-moya

¿Por qué Shakespeare hoy?   Noche de Reyes, en Quito  Jhonatan Salazar Achig

¿Por qué Shakespeare hoy? Noche de Reyes, en Quito Jhonatan Salazar Achig

Pedro Aznar: autor en retrospección l Juan Manuel Granja

Pedro Aznar: autor en retrospección l Juan Manuel Granja